El incremento de los controles de la policía en la frontera francesa en el puerto de Dover y la gran afluencia de veraneantes con dirección a la Europa continental han provocado un colapso de los controles fronterizos.
Muchos transportistas se han visto implicado en estos interminables atascos que han alcanzado los 19 km y han provocado esperas de más de 15 horas.
Ante esta situación, el gobierno británico ha decidido enviar agentes al puerto inglés para ayudar a la policía francesa a llevar a cabo los controles fronterizos a los vehículos que esperan para cruzar a Francia. “Somos conscientes de las presiones de seguridad que sufre la policía francesa en Dover," aseguró un portavoz del Gobierno británico. "La alteración ha sido extraordinaria, pero la seguridad es primordial".
Popular
También te puede interesar