Los planes del Ayuntamiento de Madrid preocupan a los transportistas

ATRADICE y el resto de organizaciones del Comité Madrileño del Transporte se han reunido con Rosalía Gonzalo, Consejera de Transportes, Vivienda e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid. Al encuentro también han asistido el Viceconsejero, Antonio López Porto, y el Director General de Transportes, Pablo Rodríguez Sardinero.

 
ATRADICE les ha transmitido su gran preocupación respecto a “la caótica regulación de la distribución urbana de mercancías que se está llevando a cabo desde el Ayuntamiento de Madrid”. Genera especial intranquilidad el calendario de acceso al AAR de Madrid Central, “que exige al sector proceder a una renovación de flota que no puede asumir, dado su alto coste de adquisición”, aseguran.
 
A su juicio, hay una ausencia total de apoyo al servicio público de mercancías para evitar mayor número de desplazamientos particulares (a diferencia de lo que sucede en el ámbito de viajeros); una patente discriminación a este sector porque no están previstas ayudas municipales para la adquisición de vehículos, y  una importante ausencia de infraestructura asociada para el suministro de gas y electricidad. Además, consideran que se está generando una gran inseguridad jurídica por el innumerable elenco de situaciones, horarios, requisitos, y tipos y categoría de vehículos afectados por estas restricciones.
 
Peticiones a la Comunidad de Madrid
En cuanto a los asuntos de competencia directa de la Comunidad de Madrid en materia de transporte de mercancías por carretera, desde ATRADICE se incidió en la necesidad de luchar contra  “la problemática de los falsos autónomos, la mal llamada economía colaborativa, las falsas cooperativas, el cabotaje ilegal, las empresas buzón, y especialmente la cada vez más extendida competencia desleal que se está produciendo en el ámbito del transporte ligero”.
 
También se propuso el desarrollo de un protocolo con los agentes encargados de la regulación del tráfico para que puedan actuar de una forma efectiva en el control del consumo de alcohol y drogas por parte de los conductores, y que las Juntas Arbitrales de Transporte asuman la competencia de las reclamaciones amparadas en la acción directa.
 
Por último solicitaron a los responsables de la Consejería de Transportes, Vivienda e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid la puesta en marcha de un plan de ayudas para la formación a fin de conseguir que la profesión de conductor sea atractiva para los nuevos profesionales, y la inclusión de incentivos para la transformación de los actuales vehículos diésel en el programa de ayudas para la adquisición de vehículos ecológicos que  se pondrá en marcha en septiembre.
 

  • Genera especial intranquilidad el calendario de acceso al AAR de Madrid Central, “que exige al sector proceder a una renovación de flota que no puede asumir, dado su alto coste de adquisición”, aseguran.
También te puede interesar