Las movilizaciones que se están llevando afectan tanto a las refinerías, peajes de autopistas y especialmente bloqueos de carreteras en las principales vías de comunicación, afectando tanto al transporte nacional como internacional. Asimismo en el día de hoy se ha procedido al cierre de algunas de las fronteras entre ambos países, agravando la situación de tránsito entre España y Francia.
Como consecuencia de dichos bloqueos, miles de transportistas españoles llevan atrapados varios días en el interior de sus vehículos, atravesando en cuyos casos una situación grave de “precariedad personal” al no poder atender sus necesidades básicas tanto de alimentación como de higiene.
[Así comenzaron las movilizaciones]
“No se puede utilizar a los transportistas como rehenes”
FENADISMER respeta el derecho a manifestarse, pero apunta que “no se puede utilizar como “rehenes” a miles de transportistas y de conductores que no tienen responsabilidad alguna sobre los motivos de la protesta, más aun cuando la gendarmería francesa no está actuando para garantizar el derecho fundamental a la libre circulación, lo que denotaría una cierta complicidad con los manifestantes”.
Desde la Federación instan al Ministerio de Asuntos Exteriores a que actúe con carácter urgente ante las autoridades francesas, por ser una cuestión de extrema necesidad, a fin de permitir liberar a los miles de transportistas españoles, y otros conductores particulares, que se encuentran atrapados en las carreteras francesas.
Actuaciones urgentes para normalizar la situación
Desde la CETM han solicitado la intervención del Gobierno español ante su homólogo francés para exigirle que actúe “de forma urgente” para normalizar la situación en las carreteras francesas y garantice la libertad de movimiento de personas y mercancías.
“De no tomar medidas de forma inmediata, la situación se podría complicar con el empeoramiento de las condiciones climáticas”, advierten desde la Confederación.
Dos millones de euros en pérdidas
ASTIC muestra su oposición a cualquier tipo de barrera al transporte por carretera en Francia, ya que limita la circulación a los cerca de 20.000 camiones que atraviesan Los Pirineos cada día.
Los responsables de la asociación alertan de que los múltiples incidentes distribuidos por todo el país están comenzado a provocar falta de suministro a fábricas, desabastecimiento de alimentos en puntos de venta y deterioro y pérdida de productos perecederos, “cuyos costes estimados, desde que se iniciaron las protestas, el pasado 17 de noviembre, estarían ya en torno a los 2 millones de euros”, estiman.
