Hace poco más de un año se prohibió la circulación de camiones por la N232 y se les obligó a circular por la AP68, y las estadísticas ponen de manifiesto que esta medida no ha supuesto un descenso de víctimas mortales. Durante este ejercicio ya han fallecido 14 personas, 3 menos que en 2018, pero la cifra supera ampliamente la media de la última década (seis fallecidos anuales).
[La Justicia tumba los desvíos obligatorios para camiones]
Desde CETM La Rioja lamentan que se produzcan estos trágicos accidentes, y denuncian que las medidas puestas en marcha desde las diferentes administraciones para paliar este grave problema social son “ineficaces e insuficientes.”
Culpabilizan a los camiones incluso cuando no están
“Entendemos que este Grupo de Trabajo no puede concluir que únicamente el alza de la siniestralidad vial en nuestra región se debe al factor humano. En el mismo sentido, mostramos nuestro total desacuerdo con la principal responsable en materia de Tráfico en nuestra comunidad, cuando afirma que "si hubieran continuado circulando camiones por la N-232, el número de accidentes hubiera sido sin duda mayor", culpabilizando así de la siniestralidad vial al sector del transporte de mercancías por carretera, pese a los esfuerzos constantes y continuados de los transportistas en evitar los accidentes en carretera, al mismo tiempo que realiza un juicio de valor infundado e inadmisible que desprecia a los profesionales que integran nuestro sector”, exponen los responsables de CETM La Rioja.
Soluciones
Los transportistas riojanos insisten en que la única solución a la elevada siniestralidad en la N232 pasa por el desdoblamiento de esta vía. “Mientras no se acometan las obras de este desdoblamiento seguiremos lamentando accidentes en esta carretera”, aseguran.
Además exigen a las diferentes administraciones implicadas en materia de Seguridad Vial que realicen un análisis en profundidad que permita conocer cuáles son los principales factores y las causas que intervienen en los accidentes de tráfico, para implantar medidas encaminadas a solucionar aquellos problemas que se han traducido este año en una inadmisible alza de la siniestralidad vial. “El incremento de dos puntos negros en la N232, pese al desvío obligatorio de camiones de esta vía a la AP68, pone de manifiesto una vez más que los vehículos pesados no son los únicos ni los máximos responsables de los accidentes de tráfico en esta vía”, concluyen.