Han remitido una carta conjunta a los 705 eurodiputados que conforman la Cámara, en la que les instan a no aprobar el Paquete de Movilidad, ante la actual crisis sanitaria que sufre Europa y su impacto en las empresas de transporte, y en especial “por sus negativas consecuencias tanto para el Mercado Único de la UE como para las ambiciones europeas recogidas en su Pacto Verde”.
FENADISMER confía en que esta nueva y última ofensiva no tenga influencia real alguna en la posición mayoritaria de los europarlamentarios mantenida hasta la fecha en las sucesivas votaciones que se han llevado a cabo en el Parlamento europeo y que el próximo miércoles se proceda a la aprobación definitiva del Paquete de Movilidad, “cuya aplicación en los próximos años afectará de forma trascendental en la actual configuración del transporte en la Unión Europea”, aseguran.
Desde la Federación recuerdan que para los países del Este la aprobación del Paquete de Movilidad supone un golpe porque el sector del transporte ha alcanzado un papel muy importante en estos países en los últimos años, tras su entrada en la Unión Europea entre 2004 y 2007. “Así, por ejemplo, el volumen de negocios de la flota polaca en 2018 representó el 7% del PIB de Polonia, el 15% del PIB en Bulgaria o el 13% en Lituania, mientras que el de las flotas alemana y francesa representó menos del 2 %, o en la española en torno al 5%”, exponen.
Los enemigos del Paquete de Movilidad no se dan por vencidos
Después de más de tres años de tramitación y cuando se encuentra en la recta final para su aprobación, los Ministros de Transporte de Bulgaria, Rumanía, Hungría, Lituania, Polonia, Chipre, Letonia, Estonia y Malta, tratan “a la desesperada” de frenar la aprobación de este paquete normativo el próximo 8 de julio en el Parlamento europeo.
